martes, 9 de agosto de 2011

Por el miedo a equivocarnos



Éramos distintos, imposibles y en futuro menos claro entender bien lo que dices,
me hace sentirme tan raro. Empieza todo a hacerse triste, a quedar del otro lado.
Tú también lo prometiste, fuimos dos equivocados. Y ahora este sitio está lleno de
noches sin arte, de abrazos vacíos, de mundos aparte, de hielo en los ojos, de miedo a encontrarse, de huecos, de rotos, de ganas de odiarse, y lo empiezo a sentir, me quedo sin aire el cielo ha caído, se muere, se parte, esto sólo es un infierno sostenido. Solo es un esfuerzo relativo. Yo no pido casi nada, que se pierdan mis sentidos y se nuble tu mirada. Pero el miedo nos consigue, se hace grande en estas manos. Mal recuerdo nos persigue. Fuimos dos equivocados. Esto sólo es un infierno sostenido, por el miedo a equivocarnos. No quiero escucharte, no insistas, prefiero esta vez encontrarte inundando mis ojos, esperando a que pase a que caigamos otra vez. Y sólo digo que nunca quise hacerte daño pero todo se nos fue y aunque ahora somos como extraños yo jamás te olvidaré.

No hay comentarios:

Publicar un comentario